jueves, 26 de febrero de 2015

Cenizas (Ashes). H.P. Lovecraft y C.M. Eddy


Relato escrito entre H.P. Lovecraft (1890-1937) y C.M. Eddy (1896-1967), publicado en el número de marzo de 1924 de la revista Weird Tales. La ilustración de la cubierta es de R.M. Bally. La revista valía 25 centavos.

Malcolm Bruce, un hombre nervioso y atemorizado, acude a ver a su amigo Prague. Le cuenta lo que le ha sucedido y le ha producido ese estado de ánimo tan alterado. Bruce empezó a trabajar como ayudante de laboratorio para el profesor Arthur Van Allister, un famoso químico. El profesor estaba totalmente absorbido por sus experimentos y solía pasar varios días sin salir para nada de su laboratorio. Mientras tanto, Bruce se había ido enamorando progresivamente de la secretaria del profesor, Marjorie Purdy, quien también le correspondía.
Un día, el profesor convoca a ambos a su laboratorio para mostrarles el resultado de sus experimentos. Coloca a un conejillo de Indias dentro de una urna de cristal y derrama sobre él cierto líquido de su invención. Automáticamente el conejillo es desintegrado y se convierte en un pequeño montón de cenizas blancas. El profesor considera que su invento cambiará el mundo al convertirse en un arma definitiva para conquistarlo.
Al día siguiente, cuando Bruce llega al laboratorio se encuentra con que Marjorie ha desaparecido. Cuanto más tiempo pasa, más inquieto está por la suerte de la chica. El profesor le llama a su laboratorio y entonces Bruce ve sobre una silla el abrigo y el sombrero de Marjorie. Sobre una mesa el profesor ha colocado una urna de cristal del tamaño de un ataúd y cerca de allí Bruce puede ver un frasco con cenizas. El joven se convence de que el profesor ha desintegrado a Marjorie metiéndola dentro de la urna. Se abalanza sobre él y luchan. El joven consigue dominar al profesor y lo mete en la urna de cristal, arrojando sobre él el líquido desintegrador. El profesor se convierte en cenizas. Asustado por sus actos, Bruce acude a ver a su amigo Prague.
Ambos vuelven al laboratorio del profesor y encuentran a Marjorie atada dentro de un arcón. Ésta les cuenta que el profesor Van Allister tenía la intención de hacer el experimento con Bruce y que ella sólo serviría como testigo. Al preguntar Marjorie qué ha sido del profesor, Bruce deja escurrir entre sus dedos las cenizas blancas contenidas en un frasco.

jueves, 19 de febrero de 2015

Astérix el galo (Astérix le Gaulois). Albert Uderzo y René Goscinny


Astérix el galo (Astérix le Gaulois) es el primer álbum de la serie Astérix realizada por Albert Uderzo (dibujos) y René Goscinny (guión). Se publicó por entregas en la revista francesa Pilote desde el número 1 (29 de octubre de 1959) hasta el número 38 (14 de julio de 1960) y fue publicado como tal álbum en octubre de 1961 con una tirada de 6.000 ejemplares, rápìdamente agotados. Se hizo un largometraje de dibujos animados con el mismo título en 1967.

En España  Editorial Molino publicó el álbum en 1965 con traducción de Manel Domínguez Navarro dentro de su colección Piloto. Tiene 48 páginas y el precio era de 35 pesetas. Editorial Bruguera  publicó la historieta por entregas en la revista Gran Pulgarcito en 1970 y después el álbum dentro de la colección Pilote con el número 34 en 1973. Tiene 48 páginas y costaba 100 pesetas.

El año 50 antes de Cristo, después de la derrota de Vercingetorix, toda la Galia está ocupada por los romanos. ¿Toda? No, porque una aldea de Armórica resiste aún a los asaltos de las legiones de Petibonum, Laudanum, Babaorum y Aquarium y Julio César está muy contrariado al ver que una pequeñá provincia pone en jaque a su ejército. El guerrero Astérix sale de la aldea para cazar y se cruza con cuatro legionarios romanos a los que vence fácilmente antes de continuar su camino. Estos últimos vuelven a Petibonum y el centurión Caius Bonus se pregunta cuál es el secreto de la fuerza de estos galos. Astérix, que ha vuelto a la aldea, invita a su amigo Obélix, un tallador de menhires, a comer en su casa; enseguida van en busca del druida Panoramix para que Astérix tome una ración de poción mágica: una poción que dobla las fuerzas del que la consume. El druida sermonea a Obélix, que también quiere beberla, recordándole que se cayó en la marmita cuando era pequeño y que los efectos de la poción son permanentes en él.

En Petibonum, Caius Bonus y su segundo Marcus Sapanus deciden enviar un espía a los galos: ante el poco entusiasmo de los legionarios, finalmente es designado el pequeño y débil Caligula Minus. Después de haberlo disfrazado de galo y haberlo encadenado, Sacapus y una patrulla de legionarios se pasean por el bosque con la esperanza de ser atacados. Son Astérix y Obélix, por falta de peleas, quienes liberan a Caligula Minus, que ha tomado el nombre de Caliguliminix. El espía se siente muy sorprendido cuando Astérix arranca sin problemas las cadenas que le atan. En la aldea, descubre que el herrero trabaja el hierro con sus puños y que Astérix tira de una carreta cargada de troncos de árboles. Durante la comida logra descubrir la existencia de la poción mágica y después de un rechazo preliminar del druida, tendrá incluso la suerte de probarla. Caligula Minus constata los efectos de la poción cuando trata de levantar una gran roca pero se ve desenmascarado cuando, durante un baile galo, los bailarines deben tirarse del bigote y el suyo es falso. Caligula Minus logra escapar y enseñar a Caius Bonus los efectos de la poción y su duración. Mientras Caligula Minus se hace masacrar por el hatajo de fornidos romanos que él ha golpeado como "ejemplo", el centurión piensa en grandes proyectos tales como ocupar el lugar de César.

Panoramix decide ir a recoger muérdago en el bosque, pero es capturado por una patrulla dirigida por Tullius Octopus. Caius Bonus tortura en vano al druida que prefiere callarse su secreto. Mientras tanto, en la aldea, Astérix se inquieta por la ausencia prolongada de Panoramix y, aunque Obélix le señala que ya no está bajo los efectos de la poción mágica, parte en su búsqueda confiando en su astucia. Se encuentra con un mercader de bueyes que duda en venderlos porque debe transportar heno. Siguiendo una sugerencia de Astérix, el mercader revela el destino de Panoramix y se muestra interesado en ir a Petibonum (Astérix le hace creer que Petibonum es un mercado de carros). En la entrada de Petibonum, Astérix casi es capturado por los romanos a causa del mercader a quien ha anunciado querer gastar una broma escondiéndose en el heno. Ya en el campamento, Astérix empieza a buscar a Panoramix y descubre que Caius Bonus y Sacapus tienen el proyecto de derrocar a Julio César, cada uno con la intención de echar al otro para mandar él solo. Cuando Astérix encuentra por fn a Panoramix, a los dos amigos se les ocurren algunas ideas para burlarse de los romanos: después de que Astérix escapa a la tortura gracias a la ayuda de Panoramix, este último prepara una poción pero afirma que le faltan fresas para terminarla. Numerosos legionarios son enviados en su busca. Finalmente, después de haber vuelto éstos con las manos vacías, es Tullius Octopus quien trae fresas, que pronto son comidas por Astérix y Panoramix.

El druida prepara finalmente una poción, pero Caius Bonus, desconfiado, decide utilizar al mercader de carros como cobaya. La poción parece ser la verdadera y todo el campamento de Petibonum vacía rápidamente la marmita. El centurión se da cuenta de que no puede levantar pesos grandes y de que los cabellos y la barba de los legionarios crecen a gran velocidad. Panoramix explica que la poción que ha fabricado es en realidad una loción capilar extremadamente poderosa. Caius Bonus decide pactar con los galos y Panoramix acepta preparar el antídoto. El druida quiere en realidad preparar la poción mágica porque los efectos de la poción capilar desaparecerán por la mañana. Después de hacer probar el falso antídoto a los romanos, Astérix y Panoramix escapan, pero Petibonum está rodeado. Serán salvados finalmente por César que envía a la Mongolia Inferior a todos los mandos de Caius Bonus.

miércoles, 11 de febrero de 2015

Fort Navajo. Jean Giraud y Jean-Michel Charlier



Fort Navajo es el primer álbum de la serie Blueberry realizada por Jean-Michel Charlier (guión) y Jean Giraud (dibujos). Primeramente fue publicado por entregas en Francia en la revista Pilote antes de serlo como álbum en 1965. En España se publicó como serie por entregas dentro de la revista Bravo de Editorial Bruguera en 1968. El mismo año Bruguera editó el álbum como el número 2 de la colección Pilote con una ilustración de cubierta de Jijé. Tiene 48 páginas y costaba 90 pesetas.

Después de la guerra de Secesión que han ganado los nordistas, el teniente Blueberry es enviado a Fort Navajo en el Oeste para hacerse olvidar a pesar de su "excepcional hoja de servicios", porque es sudista, pendenciero, bebedor, tramposo e indisciplinado.
En un saloon durante una partida de poker donde probablemente ha hecho trampas, Blueberry debe defender su vida frente a unos tipos duros. Graig, teniente de caballería, interviene y le salva la vida. A continuación, Graig se entera con sorpresa de que Blueberry ha sido destinado a Fort Navajo. Su sorpresa se transforma en disgusto cuando Blueberry critica a su padre, el general Graig. Graig desafía a Blueberry a un duelo con pistola, pero Blueberry demuestra que es un tirador de élite.

Mientras los dos hombres se dirigen hacia el fuerte, descubren un rancho incendiado y a sus habitantes asesinados con las cabelleras cortadas. Los indicios parecen señalar que han sido los indios los que han atacado el rancho y han secuestrado a los niños. En presencia del padre moribundo, Graig da su palabra de que encontrará a los secuestradores, a pesar de las advertencias de los hombres que le acompañan que afirman que se hará matar por nada. 
Graig se lanza en persecución de los secuestradores, seguido pronto por Blueberry, que se ha comprometido a salvarlo de los indios. Blueberry llega in extremis para salvar a Graig que ha caído en una trampa tendida por los indios. Ambos despistan a sus perseguidores y encuentran una columna de caballería venida de Fort Navajo para socorrerles. El jefe de la columna, el mayor Bascom, siente un odio visceral por los indios y decide atacar un contingente apache, a pesar de las súplicas de Crowe (un oficial mestizo), Graig y Blueberry. Éste, ayudado por Graig, consigue parar el ataque, lo que provoca las iras de Bascom, que ordena ejecutarle para vengarse de la humillación. Graig amenaza con denunciar la actuación de Bascom, lo que incita a este último a renunciar a los ataques contra los indios. De vuelta al fuerte, Blueberry se presenta a su comandante, el coronel Dickson, un hombre moderado que se opone a toda intervención militar contra los indios para mantener la paz. Se encuentra con Blueberry en privado y se entera de que éste tiene un pasado turbulento, que está dispuesto a pasar por alto dada la hoja de servicios de Blueberry. Por la noche, Blueberry está de guardia. Mientras discute con Crowe acerca de la difícil situación en Fort Navajo, un indio lanza una flecha con un mensaje: Cochise pide encontrarse con Dickson para poner fin a los ataques por parte de ambos bandos. El coronel acepta a pesar de la oposición de Bascom, afirmando que Fort Navajo está demasiado aislado y posee una guarnición demasiado reducida para hacer frente a los indios.

A la mañana siguiente, Bascom afirma haber comprendido que Dickson quiere encontrarse con los jefes indios en una tienda, que hace montar en el exterior del fuerte, para poder arrestarlos a todos de una vez, pero Dickson le replica que ha dado su palabra de honor de dejarlos partir libres para gran decepción de Bascom. Mientras Blueberry y Dickson se dirigen hacia la tienda que ha de servir de lugar de negociación, este último es mordido por una serpiente de cascabel. Aunque es cuidado, no puede seguir asumiendo la dirección del fuerte y nombra a Bascom comandante.
Este último hace alejarse del fuerte a Blueberry y Crowe con el fin de tender una emboscada a los jefes indios desarmados que acudirán a la tienda. Durante la discusión con los indios, Bascom reclama el retorno del niño secuestrado con la amenaza de encerrar a los jefes en el fuerte. Bajo el tiroteo, Cochise huye de la tienda. Bascom ordena a Blueberry y a Crowe que traigan a Cochise, pero se encuentran con un fuerte contingente de indios que han venido para proteger a su jefe. Los indios atacan el fuerte, pero los soldados replican poniendo fin temporalmente al ataque. Por su parte, Bascom afirma que los rehenes indios incitarán a Cochise a moderar sus ataques. Cuando un correo enviado por el fuerte vuelve acribillado por las flechas, algunos hombres del fuerte piensan que su situación es desesperada porque están aislados en el interior del territorio apache rebelde.

martes, 3 de febrero de 2015

La esclava de Fort Shanon. Keith Luger


Novela de Keith Luger (Miguel Oliveros Tovar, 1924-1971) publicada en septiembre de 1962 por Editorial Bruguera dentro de su colección Bisonte con el número 767. Tenía 121 páginas. Fue reeditada en julio de 1981 dentro de la colección Ases del Oeste con el número 1157, ejemplar que hemos leído. Tiene 95 páginas y costaba 40 pesetas.

Relato sobre las expediciones de mujeres que se organizaban para casarse con un marido al que desconocían, asunto que dio pie a una película de William Wellman titulada Caravana de mujeres realizada en 1951 con Robert Taylor y Denise Darcel. Pero en este caso, Keith Luger trasplanta el asunto de las praderas del Oeste americano a la costa este de Estados Unidos. De manera inusual, este western no pierde de vista el mar en ningún momento.

Larry Stample y Ray Masterson son dos plantadores de tabaco que han querido obtener esposa mediante la agencia El desenlace feliz. Como muchos otros de sus compañeros, esperan a sus futuras esposas en Fort Shanon. Las mujeres viajan en el Atlanta, un barco a las órdenes del capitán Endicott. Al llegar el barco en medio de una gran expectación, los plantadores deben pagar los gastos del viaje mediante tabaco en especie. Cuando las mujeres están a punto de desembarcar, el médico del puerto certifica que una extraña epidemia se ha desarrollado a bordo y que el barco debe quedar en cuarentena. Pero Larry ha tenido tiempo de ver a su futura esposa, la bella Norma Casanne, y su ira no conoce límites cuando el barco desaparece del puerto con rumbo desconocido.

Un oficial del Atlanta, que se ha quedado en el puerto, informa a Larry y Ray que el barco va rumbo a Galveston en Texas. El capitán Endicott, un personajes refinado y malvado, se dedica a estafar a todos los que quieren obtener esposa mediante agencia en los puertos que visita. Consigue de los novios que le paguen el precio del viaje en especie y luego desaparece con las mujeres hasta el siguiente puerto obteniendo así un gran botín. Ni que decir tiene que el futuro de las mujeres es parecido al de la esclavitud estando encerradas en la bodega del barco y muy poco protegidas de las torvas intenciones de la tripulación.

Larry y Ray se dirigen a Galveston en tren y allí se las tendrán que ver con el sheriff, los hombres de Endicott que se están preparando para estafar a los conserveros de la ciudad y además los pistoleros a sueldo del malvado capitán. Aparte de la habilidad con el revólver de Larry y la fuerza física de Ray, contarán con la ayuda de Turkey Clipper, un pequeño camorrista experto en lanzar el cuchillo, que parece conocer a todo el mundo en Galveston. Mientras tanto, en el barco, Norma ha encabezado una rebelión de las mujeres para conseguir su libertad, a pesar de que Endicott no duda en recurrir a la violencia para reducirlas. Por otra parte, está obsesionado con Norma y será capaz de cualquier cosa para conseguirla. Pero Larry, Ray y Turkey se lanzarán al rescate y la novela acabará en doble boda y alguna sorpresa más.

Western algo decepcionante de Keith Luger debido a lo previsible del argumento y a que tarda en arrancar debido a las escenas de comedia que inician la novela  y que son de un humorismo algo pesado. Por lo demás, el autor resuelve el asunto con su habilidad para los diálogos y alguna buena escena de acción.