domingo, 26 de enero de 2014

Un tipo vivo. Keith Luger


Novela de Keith Luger (Miguel Oliveros Tovar)  publicada en 1959 dentro de la colección Búfalo extra de Editorial Bruguera con el número 172. Fue reeditada en 1971 en la colección Héroes de la pradera con el número 72 y en julio de 1974 en la colección Ases del Oeste con el número 790. Tiene 127 páginas y se vendía al precio de 15 pesetas.

Un inventor sin suerte, Larry Parker, y un estafador de poca monta, Charles McKay, están a punto de agotar sus recursos económicos cuando reciben una carta de Milton McKay, el tío de Charles. Éste se ha establecido en una ciudad de Oklahoma llamada Petrouchka, pero las tierras que adquirió no sirven para el cultivo ya que en ellas aparece en todas partes un líquido espeso y maloliente que le obligará a venderlas de nuevo. Larry se da cuenta de que el líquido es petróleo y de que el tío Milton es millonario sin saberlo. Los dos amigos se dirigen a Petrouchka para evitar que Milton venda las tierras. Éste casi ha cerrado el contrato de venta con Irving Dedini, un agente de bienes raíces sin escrúpulos. Larry y Charles llegan a tiempo de impedir que el trato siga adelante, aunque se las tendrán que ver con los pistoleros de Dedini.
En realidad, Dedini trabaja para Mel Gibson (sic), un forajido sin escrúpulos que quiere apoderarse de todas las tierras petrolíferas de Petrouchka. La única que le falta es la propiedad del viejo Milton.
Larry salva de los pistoleros de Gibson y Dedini a Hilda Tobey, la guapa maestra de Petrouchka, y se siente atraído por la chica aunque ésta es realmente arisca. Éste será un motivo más de enfrentamiento entre Gibson y Larry, ya que el forajido también quiere a la chica.
A partir de ese momento, Gibson recurrirá a todas las estrategias y artimañas posibles para acabar con Larry y hacerse con las tierras. Larry, aunque no es pistolero, consigue salir con bien de todas las situaciones e incluso llega a ser correspondido en sus sentimientos por Hilda. Aunque Gibson impide que el banco local preste dinero a los McKay para iniciar la explotación de las tierras, Larry consigue sacarle 6.000 dólares a Dedini mediante un engaño.
La única solución para Gibson es contratar a la banda de Ruby Palance (al que Luger describe como muy parecido al actor americano Jack Palance) para que acabe con Larry y sus amigos. Mientras, Gibson quiere aprovecharse de la ocasión para conseguir de una vez por todas a Hilda, pero la chica consigue escapar del bandido e intenta avisar a Larry. La situación se pone muy tensa para Larry, Hilda y los McKay, enfrentados todos a Palance y su banda, pero un invento de Larry resolverá el asunto. De todas formas, aún les queda afrontar la amenaza de enfurecido Gibson y las asechanzas de un no menos temible Dedini.

Western humorístico de Keith Luger, un tanto previsible al comenzar su lectura pero que el autor resuelve con indudable oficio. Al ir avanzando la acción, se va abandonando el tono de comedia para dar paso a la acción y la intriga logrando el autor sus mejores momentos.

2 comentarios:

  1. Vaya, no soy solamente un servidor, jaime, un seguidor de las novelas de Keith Luger que leía con interés cuando tenía 16 años. Ahora las busco con anhelo, pero muchas están muy estropeadas. Es lástima que Ed. B no las vuelva a editar.

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  2. Hola Jaime. En estos momentos las novelas de Keith Luger sólo pueden encontrarse por internet de segunda mano o buscando en mercadillos y rastros en los montones de bolsilibros que los vendedores van colocando. Es muy normal encontrarlas en muy mal estado porque han sido muy manoseadas, es decir, muy leídas por infinidad de lectores. Algunos de estos libros está lleno de marcas, señales, nombres, etc. que los diferentes dueños han ido dejando en ellas aunque sólo sea para indicar que las han leído. Saludos.

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